Creo que te vi…

Anoche te vi. Por un momento te he visto. Por unos segundos he visto a una chica morena, con tu vestido, con tu altura y con tu pelo. Era una copia tuya. Una puta copia tuya.

El rato que te «vi» sentí como los pedacitos que tengo por corazón se empezaban a juntar. La sonrisa volvía a su sitio, y hasta la luna brillaba como si quisiese ser la luz que bañase nuestro reencuentro.

Y aunque estaba seguro que no podías ser tú, ¡qué momento de volver a ser yo! Y al acercarme, con las ganas de que el imposible no lo fuese tanto, y con las ganas de contarte en 3 segundos lo que no te he contado en meses, comprobé que no eras tú. Pero da igual. Lo que importa es que estaba deseando que fueses tú, para acercarme a hablarte. Por unos segundos, te he visto, y sé que me moría por abrazarte, besarte y secuestrarte de la discoteca para tenerte para mí. Y… ¿sabes qué?. A veces me pregunto si me lees, si piensas que eres la protagonista de cada palabra que sale de mis manos, y supongo que esa duda le da sentido a seguir escribiendo. Yo creo que me lees, no sé lo que pensarás al respecto, pero sigues mis andanzas. Yo soy feliz, me va bien o eso intento, pero no me instalo en ningunos labios por si los tuyos me llaman, por tener la maleta preparada. Y ojalá me llamen. Sé que alguien como yo podría tener a cualquiera, pero no me vale cualquiera tras haber sido tú.

Ya no me acuerdo de ti.


Sígueme en:

Facebook

Instagram

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *